Los restos putrefactos de la derecha con nuevas y recobradas emanaciones...

Casi a diario nos damos cuenta de la aparición de un nuevo partido político y es nuestro deber advertir a la población que no es nada nuevo, que son los mismos sicarios y ladrones con nombres y máscaras diferentes; fachadas de la oligarquía, pero con los mismos rostros.

Nuestro pueblo no necesita  la grotesca presencia de los mismos chivos del Erario que ahora tratan de aparecer como santos redentores, necesitamos impulsar a nuestro gobierno y que sea el pueblo quien juzgue lo bueno y lo malo que se está haciendo.

Los voceros de la derecha ahora recomiendan la alternancia, lo saludable de ella; pero jamás hablaron de lo mismo durante los doscientos años de espolear, robar y humillar al pueblo salvadoreño.

Viendo un programa de televisión el día domingo recien pasado, hubo una basura chilena tratando de decirnos cómo hacer las cosas, y nos pone como ejemplo la alternancia en la "democracia" de su país. Sin embargo, no menciona que esa demoniocracia está exterminando lo que queda del pueblo Mapuche.

En dicho programa, también un ex firmante de los Acuerdos de Paz habla de las utopías del Neoliberalismo y del Socialismo. Es necesario recordarle que las utopías dejan de serlo cuando los sistemas sociales se ponen en práctica y que la explotación del neoliberalismo al mundo es una realidad constante y sonante y no una utopía.

Por otro lado, los representantes de la derecha quisieron, como siempre, justificar la amnistía, mostrando un vasto desconocimiento del Derecho Internacional, el cual no prescribe amnistías para crímenes de Lesa Humanidad.  Sobre dicha amnistía les pregunto: dónde están los cadáveres de mis sobrinos quienes fueron secuestrados por el ejército en 1981 y jamás volvieron a aparecer? Dónde están los cadáveres de mis compañeros universitarios, maestros y miles de campesinos y obreros desaparecidos y nunca aparecidos? Hechos como éstos se cuentan por los miles y los familiares no vamos ni a olvidar ni a perdonar. Es obligación de todos los salvadoreños exigir la derogación de  ese decreto de amnistía impuesto bajo presión, cuya injusticia queda demostrada con la condena de cuatro ex-militares salvadoreños de alta graduación, procesados y encontrados culpables por las Cortes de los Estados Unidos, por crímenes de “Lesa Humanidad”.

Los deshechos hediondos de la derecha representados en esos partidos mendigantes de migajas de poder, tienen que caer despedazados en las próximas elecciones, para lo cual es necesario el intenso trabajo de las bases partidarias del FMLN y del pueblo en general. A nadie, ni al actual gobierno, ni al partido, ni al pueblo en general, le conviene tener esa clase de sabandijas putrefactas hedientas a robo, a sangre e injusticia. A nadie le interesa que esos pangolines sigan manteniendo su eterna borrachera con el sudor del pueblo, y peor que hablen en su nombre, ni como padres de la patria, ya que ello es una vergüenza y un irrespeto sin par a la inteligencia del pueblo.

Tratan de aparecer como mansas ovejas, cuando han sido y seguirán siendo parte de los sicariatos que escondidos en la oscuridad y en el poder económico siguen ensangrentado a nuestra patria. Se hace necesario que las fuerzas populares de la nación los pongan en el lugar que le pertenece: La cárcel; de otra forma, como hienas amulgadas, esperan la oportunidad para meterles los caninos al pueblo.

Son lo más podrido de la sociedad. En la contienda pasada nos enfrentamos a ellos cuando en una noche antes del triunfo, nos habían metido decenas de buses repletos de extranjeros en las Villas Olímpicas, en el Estadio Cuscatlan, en Camas Capri, etc. Son los mismos y las mismas que se hicieron los del ojo pacho mientras los arenarcos vendían y empeñaban nuestra patria. Son compañeritos y compañeritas de la Nalgona Torres, el suicida con mano ajena; del narco Roberto Silva, del Meneses,del Sandoval, del Reinerio y de todos los capos con poder. Son los que junto a Saca se robaron todas las frecuencias radiales administradas por la SIGET. Los mismos que nos amenazaron en la segunda vuelta electoral de San Isidro, Cabañas y San Agustín Tres Calles, Usulután.

Los rostros traseros han comenzado a aparecer: ya salió la Silvia, el Gallegritos y el Rovira; tambien el Orlando, el Kike Rais, el Gerry, el Umaña, etc. No sería raro que el mocoso llorón Quijano se les uniera, junto al Ciruelo y el Parkimetro. En fin, todos esos malacates malnacidos que la patria abortó en su preñéz bestial. Son la antípoda de la Paz y el Cambio, los ganosos de seguir mamando las tetas del Erario Nacional, los hijos destetados de la hidra.

Paul Fortis  

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