Cualquier persona sin necesidad de pertenecer a nuestros famosos y fogosos cuerpos de inteligencia, se da cuenta que la muerte del compañero Marcelo tiene orígenes y causas políticas y que hay que apuntar directamente a los escuadrones pagados por Arena y los representantes y perros faldearos de la Pacific Rim, como responsables directos de dicho crimen.
La Pacific Rim fue acusada públicamente en Canadá en el periódico de mayor circulación de la capital canadiense, The Ottawa Citizen, de estar financiando grupos de criminales paramilitares (thugs decía el periódico), en El Salvador y, bueno, las extorsiones de dicha compañía no fueron ni encubiertas ya que ofrecían grandes sumas de dinero a alcaldes y alcaldesas amorales para que publicitaran la Minería Verde (cuál?) de la Pacific Rim.
La fobia y frustración por la derrota causada a la Pacific Rim por parte del pueblo salvadoreño, a nivel nacional e internacional, se pone de manifiesto en las extorsiones y crímenes cometidos por sus sabuesos falderos en el departamento de Cabañas. El asesinato de Marcelo no es el único crimen, hay crímenes tan horrendos como la contaminación progresiva dejada por los pozos de exploración y la inestabilidad socio-política de todo el departamento.
Sobre lo que ha pasado y está pasando, hay que preguntarles a los defensores de los Picoteros del Norte. Hubo foros aun en la Universidad Nacional donde oscuros abogados con una trayectoria más sucia que las cloacas capitalinas, trataron de engañar al pueblo con la "Minería Amiga", la "Minería Verde", la "Minería Ecológica", ocultando al pueblo salvadoreño estudios científicos realizados en Canadá, específicamente sobre el proyecto El Dorado y ponían el triste argumento que por qué si en Canadá o en Brasil se explota la minería, por qué no en El Salvador; vaya, qué agrimensores! Comparar el rio San Lorenzo canadiense o el Amazonas con el Lempa, no puede ser más que de malintencionados.
Lo que podemos ver en la actualidad es la respuesta de la narcoderecha a las luchas de nuestro pueblo. En San Isidro, Cabañas, se robaron las elecciones y se fue a una segunda vuelta y se las volvieron a robar. Un día después de dichas elecciones, la residencia de dos compañeros observadores fue violentada y no se robaron otra cosa que las cámaras de los compañeros; la Fiscalía, como siempre, no encontró razón para investigar el caso, simplemente fueron ladrones o criminales comunes o los muertos eran homosexuales, haciendo gala de la homofobia arenarca, fórmula misma que fue usada cuando asesinaron al Padre Romero en Sonsonate y a otro religioso guatemalteco, defensor también de las minorías y luchador contra la explotación minera.
Nuestro pueblo sigue enterrando a sus muertos. El enemigo sigue aplaudiendo, ello nos debería dar las pautas a seguir y no esperar que la corrupta Policía Nacional o los fiscales criminales investiguen los casos, ya que para ellos seria auto investigarse.
En nuestra patria, aunque no lo queramos, nuevas luchas, duras luchas se avecinan. El actual gobierno tiene que tener presente que la narcoderecha no ha descansado un rato en su tarea desestabilizadora. El FMLN ya hubiera advertido al ejército sobre cualquier maniobra sucia. Lo que la compañera Aleida Guevara dijo, se los he venido repitiendo desde hace ratos: quien se acuesta con militares amanece con un canon en el trasero y pare hijos con polainas y lo que sucedió en Honduras era algo que se había visto venir desde que salió gateando del pentágono, lo que pasa es que nuestros analistas todavía siguen creyendo en pajaritas preñadas o que las ranas vienen de la luna.
Ponciano Montanes
Colaboración
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el dia de hoy la prensa grafica saca un reportaje en las primeras paginas sobre las regulaciones a medios en venezuela, me pregunto ¿acaso nos importa lo que pasa en venezuela? ¿vivimos en venezuela o en el salvador?
ResponderEliminarentonces porque la prensa grafica y los "medios de comunicacion" no sacan una noticia como la de los periodistas de cabañas, que si nos afecta porque es de el salvador.
yo no he visto a algunos "analistas" y empresarios hablar de esto, ha pero no vaya a ser en venezuela porque entonces...