La Jodarria del Fin de Semana (adelantada)...

Un súbito riiing! rompio el silencio de la noche... -Aló? -Despertate maje, mirá que al que madruga el espíritu del Mayor le ayuda! -y quien está al otro lado, pués? -Soy yo, Walter -cuál Walter, el Walter Mercado? Dígame, quien ganará las elecciones del 2009?

-No jodás, pasmado, soy yo, el Walter Araujo, el del TSE! -No le creo! Conoce nuestro código secreto? -Noventa millones! -Ahhh, achís, sos vos... y me despertás para qué, vos? -Mirá, vestite y te venís a mi casa, que te he preparado una misión. Pero te venís ya, que te la voy a encomendar...Quier, dos, tres, cuatro! El poleciyón, al escuchar el "quier dos...", se levantó de un sólo huevazo (reflejo condicionado por Helena Fuentes, dirán ustedes), se peinó los tres pelos de la totoca, se puso su indumentaria y se calzó las siete leguas, las mismas que había embarrado de churria cuando escuchó los primeros pijazos de la ofensiva del 81. Se zampó su 9 milimetros en la cintura y se fue, hecho un pedo, donde su viejo y querido amigo. Se conocían desde muy atrás, desde la época del Batallón BMW; habían establecido tremenda amistad que estaba sellada con sangre y lodo. Al nomás llegar a la casa del mañoso de los 90 millones de los lisiados, lo saludó con la mano derecha en alto, así como con dos besos nacionalistas en los cachetes. -Entonces, pa' qué soy bueno?, preguntó. Walter, sobándole la pelona, y con una voz que denotaba un inmenso placer, le soltó de un sólo pijazo : -Hoy comenzás a recuperar terreno, maje! Tengo un plancito bien vergón e infallible... -Ajá, barájamela más despacio, le suplicó el poleciyón. -Mirá, como esta mierda no te cuaja, y como no te levantás ni con Viagra aplicada directamente en la vena, en transfusión directa, pues vamos a ver si te hacemos aparecer en las actividades del TSE. Olvidate de los vicepresidentes que no quieren hacer equipo con vos, ni del voto duro que hemos perdido, ni de las encuestas con malos resultados, ni la cagada que te mandaste con la Tandona, ni las mierdas que dijistes en El Faro, ni nada por el estilo...

-Achís, pero si voy bien vergón en la encuesta de "Bola a la Derecha", que no escuchás el programa? Tambien voy bien vergón en las encuestas de la Prensa, el Mundo y el DiHoy. Tan sólo hace dos meses vi a los encuestadores de la Mitofski que andaban tocando puertas en La Escalón y la Santa Elena...Pa' decirte que ayer un pijazo de bichos me pedían que me tomara fotos con ellos.

-Mirá, dejémonos de pajas. El tamal ya está en la olla. Lo que te quiero pedir es que seas más visible, que te aparezcás como "de repente", en las actividades que organizadores nuestros estarán llevando a cabo. Es que el volado que hay que hacer es justificar los resultados que estamos preparando. Me entiendes Mendez o te explico Federico? Me entiendes pendejito o te hago un dibujito?

-Mirá, acordate que vos y yo ya cumplimos un vergo de misiones, le respondió con aplomo el poleciyón. Acordate de aquellas madrugadas cuando agarrabamos pulso con los bolitos de la Avenida; o cuando vigilabamos la Troncal del Norte, cerca de Ciudad Delgado, ya que no nos daban permiso para ir más lejos. Acordate que yo soy de plan y ladera, y que no me ahuevo con nada. -Vergón, Rodriguín!, exclamó Walter, frotándose las manos... -Vamos a invitar a la majada de las universidades a un show que vamos a dar. Ahí vos te apareces como que si nada, me entendés, y te echás un buen discursito que te vamos a escribir para que no te trabés todo. Vas a convencer a la majada para que vote por vos... -Va pués...

Una semana después, los dos amigos se dieron cita al lugar de la actividad organizada por el Tribunal del Seguro Engaño, el TSE, y se desarrolló la siguiente plática: -Que pasó bicho? Ya te aprendiste el discursito que te escribimos, acordate que no tenés que cagarla, hay un vergo de gente que vino a la actividad, y no es gente pasmada, son estudiantes... -Puta, fijate que se me perdió el papel. Pero ahí voy a hacer la maldita para echarme algo bueno y sabroso para la majada... El tamal de los 90 millones, con un poco de inquietud, le preguntó: -Estás seguro? Porque sino ahí anda el Ivo, o el Giovanni, esos majes, por una botánica, cualquier mierda te pueden escribir... -No'mbre, no te preocupés, que no oiste al Salivoso que dijo que ya la traba no se me lengua? Mirá que me vine con sombrero para no chamuscar el vergo de ideas que traigo en el coco. No temais al que te orinó la cara..o algo así dice el dicho, vedá? -Hmmm...va pués, pero no la vayas a cagar!, sentenció el tamal de los 90 millones. Media hora después se anunciaba por los altoparlantes: "Damas y caballeros, recibamos a nuestro invitado principal, el candidato por arena, el señor Rodrigo Avila!!" La majada, atónita, anonadada, encabronada y echando puteadas, comenzó a abandonar el lugar, no sin antes chiflarle la famosa partitura del tum blin blin cerote!... El poleciyón, con toda la instrospección del mundo, tal un autista, concentrado en sus palabras y sin darse cuenta que la majada abandonaba la sala, comenzó diciendo : "Damas y Caballeros, Hoy nos reunimos para pasar a otro ciclo. montados en un triciclo y pedaleando con fervor nacionalista, llegaremos a otro ciclo que es el próximo después de este. Vamos a combatir la violencia abriéndole la jaulita a las ratas, porque la violencia se desarrolla como cuando agarran a 20 ratas y se dan verga. Y si agarran a otras ratas más gordas y las encierran en Casa Presidencial, pues, pues...Pero pasando a otra cosa, vamos a reglamentar a las compañías que venden gasolina, y la regla será renovada cada mes, hasta que le llegue la menopausia y vuelvan a hacer lo que quieran en un ciclo de dos meses, vedá?

Quiero decirles que me vine por la sombra para no chamuscar este vergazo de ideas que les traigo..."

Al tamal de los 90 millones se le salían las lágrimas. Sabía que Rodriguín la había cagado rotundamente. La misión era bien jodida : tratar de domar a la majada, pero eso ya no era fácil. Así que se zampó entre bambalinas y, arrodillado, se pusó a chillar, a moco tendido...

En esos precisos momentos el poleciyón salió de su ensimismamiento del discurso y, justamente, cuando se disponía a decir qué problemas iría a resolver después de 19 años de promesas vacías, se oyó un furibundo rebuzne de algún burro poyón y saludable...

Y el cuilio tatarata, enojadísimo, grita : -Quién gran putísimas hizo eso? De dónde salió ese rebusnido desentonado? Y entonces, alguien de los instrumentos de sonido le dice: -No se preocupe, sólo es el eco! El poleciyón se puso fiiirme, dió media vuelta a su derecha, se bajó con paso militar del podio , y, en un "quierr dos, tres cuatro", se zampó entre bambalinas. Acto seguido sacó su cuete 9 mm, se arrodilló, abrazó a su amigo...y en un impulso que le salió del corazón, y apuntando al vació, exclamó : -Nadie me comprende, pero me vale verga, sigo Presente por la Patria!

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