Desde la Diáspora...

¡Un saludo a mis compatriotas en la diáspora y el terruño, y mis agradecimientos por la bienvenida!

Este es un relato que hace 20 años se habría salido del cajón en la Misión de El Trompudo, pero hoy las elecciones gringas son cruciales para mí, como salvadoreño en la Diáspora, siempre pendiente del presente, pasado y futuro de Mi Patria, pues aunque oficialmente, y por un pelito, Arena no nos ha hecho colonia gringa todavía, extraoficialmente ya hace ratos nos hicieron.

Casi todo el contexto político en mi tierra me ha hecho comprender que el Partido Arena es un apéndice del Partido Republicano, y 20 años de ineptitud derechista en Mi patria y 8 años en mi Diáspora, me dan la pauta para pensar que una izquierda gobernando en ambos países no puede ser peor, y siempre será mejor que lo vivido.

Lo imposible se va a dar en ambos casos y el histórico triunfo del negro Barack Obama ya comenzó.

Esto me hizo recordar este relato:

NEGRO POR GUSTO

A Leroy lo insultaban los negros envidiosos llamándolo "negro por gusto", porque era de estatura pequeña, no podía bailar ni cantar, y decían que tenía la paloma chiquita... pues le clavaron "negro por gusto".

Observando la extrañeza de ver a un humano de piel negra, ser nominado candidato para Presidente de uno de los dos mayores partidos en el corazón de la élite de raza blanca que domina el mundo actual, me acordé de Leroy. Lo que está pasando en USA también nos interesa a los salvadoreños, pues como ya dijo Mauricio Funes, los gringos del Partido Republicano son, en parte, culpables de tener hoy a Saca, y hay que evitar que se repita... Y es que el Partido Republicano y Arena están en la misma extremista escala, donde el dinero importa más que el humano, la familia y su medio ambiente.

El pueblo gringo va a salir de ocho desastrosos años de gobierno Bush, y con la bolsa vacía, aparentemente humildes, parecen querer aceptar de lagartija para arriba como presidente, pero no otro Bush o acólito. Y, como dicen los gringos, "chances are" que a los dos partidos de extrema derecha les va a caer una señora talegueada...

El potencial primer Presidente negro Barack Hussein Obama me recordó la historia de Leroy.

En 1984 fue el boicoteado verano olímpico de los gringos, y en Chicago hacía un calor de la gran diosa. Yo trabajaba de llantero, pero si le pongo "caché", como le encanta a los gringos, mi profesión u oficio sería "Mecánico de Llantas". Total, mi trabajo consistía en cambiar, balancear, y reparar llantas de vehículos livianos en una compañía localizada en el corazón del sur de Chicago, el territorio de los afro americanos.

Leroy, quien era amigable, sonrisa afable, y plante inofensivo, nos agradaba a todos los latinos y negros segregados en los dos talleres, excepto por un puñado de prietos envidiosos "mala onda", de esos que se hallan hasta en China, y que siempre le tiraban chinas a Leroy por su estatura.

Y es que Leroy tenía algo que la currunchunchún de llanteros no teníamos : Leroy era graduado universitario, pero no era tufoso, en tres años que trabajamos juntos nunca noté que viera alguien de menos, o sacara pecho de sus logros académicos. Leroy era un hombre humilde y andaba en sus 30's, pero seguía soltero... una secretaria raza negra una vez aseguró que Leroy no era canelón.

Manejaba carro del año, se ponía trozo de ropa, zapatos de cien vergas, y oro en puta. Su oficina tenía alfombra y aire acondicionado, y también era apreciado, respetado y tomado en cuenta por la élite blanca mandamás. Sin embargo, Leroy llegaba al calor, la suciedad y la negrura donde trabajábamos, a platicar con todos; pero con nosotros, los latinos, se pegó pues decía quería aprender español, y lo estaba haciendo bien. El chavo, sencillamente, era buena onda.

En ese taller-edificio, y como lunares de charco, nos segregábamos siete latinos: dos potorros, dos mexicanos, dos chapines y yo. Era un local de casi dos manzanas de las nuestras, dos enormes hangar-talleres con alrededor de 200 empleados en las diferentes secciones.

Los negros eran la mayoría, pero sin tener título universitario y pocos con high school. Hacían, como nosotros los hispanos legales e ilegales, los trabajos más vergueados y de más baja paga. Los blancos europeos eran apenas un 5%, pero poseían la empresa, ocupaban las posiciones claves y ganaban los más altos salarios. Leroy, con su título y como Lead Senior Accounter, se hallaba entre los altos asalariados.

Trabajando un día de verano, oímos un disparo en la esquina opuesta y vimos un negro caer al suelo y dos más salir corriendo... era Leroy que salía de comprar su lunch y era asaltado por sus mismos hermanos de raza.

Un disparo en la cabeza acabó con su vida... La mañita del negro de gustarle el matarse entre sí.

El carisma de Leroy es el mismo de Obama, el mismo exudado de inteligencia, el impasible optimismo, y, sobretodo, la clara y comprensible manera de expresarse.

Los gringos, no me cabe duda, necesitan a Obama para parar el desplome que los tiene en picada. Pero la raza negra de Obama tiene en jaque al bloque racista de la población blanca mayoritaria, o sea, los llamados "rednecks", este segmento es el más violento y pertenecen a organizaciones racistas y anti inmigrantes, entre ellos se halla el KKK. A este bloque le pela el eje el destino del país. Ellos, sencillamente, no quieren a un negro o hispano de Presidente. Punto! En general, este segmento no tiene título universitario, son desde high school hasta drop-outs.

Los rednecks son el equivalente en El Salvador de los que sólo saben leer y escribir hasta los iletrados y apangados que apoyan a ARENA, desgraciadamente. A diferencia de los rednecks en gringolandia, en El Salvador son la mayoría, de allí la necesidad de educar a esta gente. ARENA, sus potentados y lacayos, saben esto, por eso el flamante súper ministro Figueroa una vez dijo que "si una escoba proponían de candidato una escoba ganaba". Ellos saben que los iletrados y apangados son areneros de muerte, aparte de los descendientes de extranjeros ricachones y millonarios.

Obama ha establecido que se sentará a hablar con todos los países terror sponsors, incondicionalmente. Esto tiene chiviada a la mara de hebreos sionistas que financian la millonada que gastan los dos partidos en sus campañas, con la condición de incondicional apoyo, aunque sea errado para el estado de Israel. Destacándose entre estos grupos está el llamado Lobby Judío. El lobby hebreo es casi el equivalente de la ANEP en El Salvador. Y de allí que Funes parecerá, quizás un día, como me pareció Obama, hace un par de semanas, cuando fue a negociar con el Lobby hebreo. Probablemente que, sin ese paso, él no podría tener chance de llegar a la guayaba. Son las tristes realidades de la política.

Hay que detacar, tambien, que al Lobby le pela el eje USA, ellos velan sólo por el “bienestar” de Israel, aunque para esto espíen y traicionen a USA.

Los rednecks y el Lobby hebreo son los obstáculos que Obama tiene que superar.

Y lo mismo con ANEP en el terruño : a estos extranjeros sólo les importa mantener el status quo para seguir enriqueciéndose. El Salvador como país, así como su pueblo, les ha valido madres por 184 años.

ANEP y los medios son los obstáculos que Mauricio Funes tiene que superar.

Sin embargo, tanto Funes como Obama tienen la encuesta a su favor: los dos son apoyados por educados. Pero con Obama ellos son la mayoría, y por consiguiente difíciles de darles atol con el dedo.

Evitar que se repita esto en El Salvador es la Misión de todos.

Pero si Funes y Obama lo logran y llegan a ser Presidentes, tienen que cuidarse de no tener un final como el de Leroy, el "negro por gusto".

Terrícola
Prestado de http://cuxcatla.blogspot.com/.
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