Arena recoge sus despojos entre rabietas y acusaciones con su misma dirigencia.

A quién culpar? Hay diferentes versiones y todas son un equívoco total. Por otro lado, los partidos resucitados vuelven a la tumba de donde fueron levantados por los mismos areneros. Mario Acosta Oertel, quien declara con grandeza ser de la "horneada D’abuissoniana" (vaya, qué orgullo!), se rebela contra su padrinos, al mismo tiempo que Orlando Arévalo es declarado "non-grato" por el partido de las manos sangrientas y cleptómanas. La debacle definitiva de arena no tiene nada que ver con las elecciones presidenciales, durante las cuales lo que les falló fue el fraude horripilante que fue destartalado por el pueblo salvadoreño y nuestros equipos de Defensa del Voto. Fuentes directas informaron que nos habían infiltrado los servicios internacionales de computación y en los últimos minutos trataron de ganar tiempo, haciendo que los conteos no cuadraran, con el plan maléfico de convertir los votos nulos en impugnados, y de ahí a votos válidos. Los últimos reportes de la Observación Internacional hablan de números elevados de casos de fraude y, bueno, el partido mismo sabía que el 8.5 % de los votos areneros iban a ser producto del fraude incontrolable del cual fui testigo ocular, ya que tuve que enfrentarme con César Funes y Gallegos en las Villas Olímpicas Centroamericanas, lugar donde habían metido 20 buses procedentes de Santa Ana, y como cien vehículos a los cuales tomé fotos y envié un reporte inmediato pidiendo auxilio a Radio Cadena Mi gente, a la Maya y al Co-latino, lo mismo a Roger Blandino Nerio, alcalde de Mejicanos y los diputados William Hernández y Werner Marroquín, con quienes y junto al pueblo capitalino, le hicimos frente a los vociferantes arenarcos. "Y vos, dónde naciste", me gritó uno de los arenarcos antes mencionado, a lo cual le contesté que "por ahí, menos en el pútrido muladar donde vos nacistes, y no me vosees, le dije, que jamás nos hemos ni nos hartaremos en el mismo plato, yo vengo de la luna y que por ello soy lunático cuando estoy cerca del fango", terminé diciéndole. Mientras nosotros nos enfrentábamos en las Villas, otro grupo de compañeros y compañeras hacían lo mismo en el Estadio Cuzcatlan, y nuestro pueblo detenía y bajaba nicaragüenses, hondureños, colombianos y guatemaltecos a lo largo de la nación. Nuestro partido tiene la capacidad para demostrar estadísticamente los miles de votos fraudulentos mientras en nuestra memoria bailan los personeros de arena queriendo defender lo indefendible. En el centro de Votación José Simeón Cañas, donde serví en una JRV, les anulé varios votos por pérdida de secretividad. Daban risa: una vieja arenarca, haciendo uso de garbo y mala educación, expuso la papeleta como si estuviera guindando un calzón en el tendedero y tuve que decirle al marido que el voto era personal y que él no tenía ningún derecho a estar vociferando e irrespetando nuestra autoridad y que ya lo podía mandar enchuchado de la misma forma como llevaron a Chico Chimichanga Flores del aeropuerto de Miami. Otro arenazi que se creía que andaba filmando en la Escalón, y haciendo alarde publicitario, sacó su pentax y le tomó fotos al voto. Lo anulé también : el voto es secreto y la fotografía lo hace público y así salieron bien cachimbeados de la JRV 203. La debacle de arena no tiene sus causas directas en las votaciones, las tiene en la naturaleza de un partido criminal, lleno de sinvergüenzas procesados a nivel nacional e internacional, de los cuales el pueblo está más que harto. El pueblo salvadoreño y nuestro partido, nos sentimos más que orgullosos de haber vencido en las urnas a la oligocracia más rapaz de toda Latinoamérica. Por ello, toda Latinoamérica y el mundo están más que consciente ya que se reciben a diario miles de cartas, reportes, entrevistas que hablan de lo mismo: Felicitaciones Pueblo de Farabunterra, han ganado otra guerra! Es hasta risible que Ciro ande soñando con la presidencia de la Asamblea, mejor debería ir pensando en el Hotel Mariona, ya que cuando se comience la finiquitación auditoral de los lugares por donde la rapiña ha pasado, nos encontraremos con los desfalcos más grandes que esta nación haya conocido hasta la actualidad. Es risible también el cambio de piel de los advenedizos. Unos de ellos me habló el siguiente día después de su Armagedón, para decirme que "habían despertado bien rojitos"; "del trasero" -les contesté-, "de la churrutaca imparable que el pueblo les ha recetado". Mientras tanto, el Monje Trapense Ponciano Montañés y Ermitaño fue informado de que en la Escalón, San Benito, Lomas de Altamira y La Mascota, el Peptobismol se había terminado en todas las farmacias de la región, y que ni Chico Laínez podía salvarlos. También fue informado, según me comunicó Ponciano, que había una reunión golondrinera entre los plumíferos flemáticos de la prensa oscurantista arenarca. Yo he dicho, dijo un bicho...pero ahora, a trabajar se ha dicho! Desde el Fogón Ideológico, PAUL FORTIS

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