23 de febrero de 2008

Dónde están los niños desaparecidos?


Hace más de 15 años se callaron las armas en todo el territorio nacional, no obstante, en muchos corazones permanecen, como un legado de la guerra, interrogantes terribles y pérdidas insoportables. Los niños desaparecidos (secuestrados por el ejército salvadoreño y los cuerpos de seguridad) han sido las víctimas permanentes, silenciosas e ignoradas del conflicto. Ellos son también los sobrervivientes, los que, a pesar de todo lo que les pasó, están vivos en la actualidad. Sus familiares, victimas incosolables, llevan muchos años buscándolos.


"Del que ya murió se sabe que está muerto. La familia está segura que puede ir al cementerio. Es un luto duradero de años y años. Del que desaparece no se está seguro si vive o muere. Es más desesperante. Uno quiere saber. Uno está entre la esperanza y la desesperanza.. (María Juana Benavides. Testimonio recogido por Probúsqueda y citado en su informe de abril de 1999).

"Esa acusación de la desaparición de niños es realmente como una novela de Gabriel García Márquez, o una cosa así, da risa, nunca ha pasado. Dónde están los niños? Están en algún orfanato secreto? O nos los hemos comido? Horneados? Asados? O sancochados?!…Yo realmente no entiendo por qué continúan con estas historietas". (General salvadoreño Mauricio Vargas, en entrevista al San José Mercury News, en 1995. Citado por el informe de Probúsqueda, abril 1999).


La estrategia fue la misma en El Salvador, Guatemala, Honduras, Brasil, Uruguay, Paraguay, Argentina y Chile : secuestrar sospechosos, mujeres embarazadas incluso, robar y vender a sus niños que nacían en las cárceles. O, como en muchísimos casos ocurridos en El Salvador, llegar a los caseríos o pueblitos, aplicar la "Ley de Tierra Arrasada" (matanzas y destrucción material). Los niños eran asesinados con bayoneta, bala o metidos en hornos artesanales y quemados vivos. Los niños más bonitos y saludables eran secuestrados y, posteriormente, vendidos. Y los que no fueron vendidos? Se supone que fueron utilizados para extraerles sus órganos.


La Comisión por la Verdad en El Salvador, puso en papel y reveló, en toda su magnitud, aquello que se veía o se sabía en pequeñas porciones durante la época de la brutales dictaduras militares y civiles. El ensañamiento con los niños fue particularmente grave. Sobre el terreno se aplicaba con una violencia particularmente brutal, contra mujeres embarazadas y bebés. No describiremos aquí estas formas, pues enferman el sólo pensarlas y recordarlas. En otros casos, los bebés y niños más saludables sobrevivieron a las matanzas, siendo enviados a casas de altos mandos militares, para su posterior venta y adopción internacional. En El Salvador, a estos sitios se les llamaba "Casas de Engorde".

Muchos de los bebés y niños de tierna edad que sobrevivieron a sus padres, liquidados por acciones militares, terminaron siendo adoptados por esos mismos militares o enviados en adopción internacional. Aún hay muchísimos casos de desapariciones no resueltas.
Uno de los periodos más álgidos del conflicto armado fue entre 1980 y 1988 ,cuando las fuerzas armadas llevaron a cabo operaciones de "limpieza" contra la población civil. Varias masacres tuvieron lugar en este periodo, incluyendo las del Río Sumpul y El Mozote, durante las cuales los miembros de familias quedaron separados entre sí o los padres y madres fueron asesinados, y los militares se llevaron a los niños sobrevivientes. A esos niños los llevaron a orfanatos u otras instituciones, o los mantuvieron en instalaciones militares, mientras que otros fueron dados en adopción, dentro del país o en el extranjero, o quedaron en casas de militares y sus familias.

Estos son los niños desaparecidos de El Salvador, cuyas familias los buscan desde entonces.
Miles de jóvenes salvadoreños viven hoy en Honduras, Guatemala, Estados Unidos, Francia, Australia e Italia, lejos de sus familias de origen y pensando que, de pequeños, fueron abandonados y su suerte les llevó con una familia extranjera que los acogió en adopción. Pero la idea es errónea: no fueron abandonados por sus padres, sino despojados de ellos durante el conflicto armado que El Salvador sufrió durante el decenio de 1980.

Muchos reencuentros se han dado entre los niños desaparecidos y sus verdaderas familias biológicas, encuentros que han sido posibles gracias al trabajo noble y titanesco de gente como Jon Cortina (QEPD) y PROBUSQUEDA. Esos encuentros han estado llenos de emociones y esperanzas.
En Argentina se están llevando a cabo juicios contra militares acusados de haber secuestrado a niños de opositores políticos que fueron asesinados por esos mismos militares. En El Salvador, cuándo habrá justicia para las familias dolientes?

"...este hecho violatorio de derechos humanos, fue una práctica del Estado salvadoreño; agentes de seguridad, militares y personas particulares cometieron este tipo de hechos con el apoyo o aprobación del Estado. En el informe de la Comisión de la Verdad se documentaron más de 5 mil casos, pero según los Comités de Madres de Desaparecidos los mismos sobrepasan los 9 mil. Detrás de la víctima principal aparece toda su familia como víctima que sufre esperando el día en que su demanda de justicia y de reparación sea escuchada. La desaparición forzada es una de las más penosas páginas de la historia nacional y signo de una patología de la sociedad salvadoreña: la impunidad". Pro Búsqueda.

LAS HERIDAS NO PUEDEN CERRAR SI NO HAY JUSTICIA!

Aqui les ponemos algunos sitios internet bastante interesantes para informarse más sobre el tema:

http://web.amnesty.org/library/index/ESLAMR290042003

http://www.derechoshumanos.org.mx/modules.php?name=News&file=article&sid=301


Y este sitio es el sitio de PROBUSQUEDA, en El Salvador : http://www.probusqueda.org/

2 comentarios:

  1. Anónimo6:45 p. m.

    Hace algun tiempo invitamos al padre Cortina a Canada y se llevo un sueno de publicar un libro de pro busqueda en ingles, con la ayuda de la Universidad Fraser se iso la traduccion, el siguiente paso es buscar un patrocinador para la publicacion cosa que estabos buscando.

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  2. Anónimo11:38 a. m.

    SI NO HAY QUE OLVIDAR, ESTOS MALDITOS CREEN QUE YA OLVIDAMOS ASESINOS DE MIERDAAAAAAAAAAA NO FUERON CAPACES DE PEDIR PERDON LA TUNCA KAKA A LAS FAMILIA DE LAS NIÑAS SERRANO... PERO CLARO ESO ES DE GRANDES ESTADISTAS!! ESE PELELE QUE SABE!!!

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